¿Sueñan los tesauros con documentos eléctricos?

Es muy socorrido parafrasear el título del relato de Philip K. Dick, siempre queda bien, y suele llamar la atención. No me he podido resistir a ello, teniendo en cuenta el contenido de la entrada de esta semana. Y es que en esta ocasión se trata del futuro del tesauro en el mundo digital.

El pasado 19 de febrero, ISKO UK celebró un encuentro de discusión al que llamó «The Great Debate«. El punto de partida del debate realmente merecía el nombre: «This house believes that the traditional thesaurus has no place in modern information retieval«. Dos ponentes a favor de la afirmación, otros dos en contra, y a exponer argumentos. Luego un panel de expertos que revisan las ideas y propuestas, un tiempo de intervención del público, y a votación. Sorprendentemente o no, los defensores del tesauro y de su importancia ganaron el debate…

ISKO UK ha puesto en su web (hecha con Drupal, como no podía ser menos) el audio de todas y cada una de las intervenciones, así como las presentaciones de los ponentes. Un buen rato de oír explicaciones y debates sobre un tema que puede parecer aburrido, pero que en realidad demuestra la vitalidad del pensamiento sobre aspectos de ciencias de la información que hay por ahí. Igualico que la reverencia que se ve por los congresos y debates de las españas, donde no rechista nadie, por anticuado o erróneo que sea lo que se oye.

Realmente, la cuestión no versaba sobre si el tesauro tenía futuro en el mundo digital o no, sino si el tesauro tradicional tenía sentido en el contexto actual. Tomando como punto de partida la norma que define el tesauro, realmente un tesauro puede llegar a ser muy caro de mantener, complejo, e inmanejable para una persona no experta. Por contra, los tesauros obligan a ser precisos en conceptos y relaciones, lo que repercute inmediatamente en una mejor y más precisa organización de la información. Se trata de estructuras semánticas, imprescindibles en cualquier caso. Y la mayoría de estas estructuras, llámense como se llamen (tesauros, taxonomías, ontologías…) combinan conceptos, relaciones y etiquetas. La mayoría de los participantes aceptaba como válido el concepto de tesauro, pero mostraba diferentes aproximaciones a lo que era o dejaba de ser realmente un tesauro, así como la necesidad o no de cumplir estrictamente la norma. Y todo ello sin olvidar que, en el entorno digital, son los usuarios los que necesitan herramientas para acceder a la información, y a ellos deben orientarse las herramientas que se diseñan para ello.

Un tesauro no siempre es la herramienta más adecuada en un contexto dado; si lo es, cabe plantear si es necesario adaptar las reglas al entorno de aplicación; si no lo es, entonces hay que buscar otra aproximación a la organización de la información… en cualquier caso, la ciencia de la información no es fija e inamovible: debe ser dinámica y fluida, adaptable… los saberes y técnicas de hace 50 años difícilmente encajan sin reflexión ni flexibilidad en la actualidad.