Reseña: Documentación audiovisual. Nuevas tendencias en el entorno audiovisual.

Hace unos días recibí un ejemplar de Documentación audiovisual. Nuevas tendencias en el entorno digital, que ha sido publicado por la editorial Síntesis, y del que son autores mis apreciados compañeros Mercedes Caridad, Tony Hernández, David Rodríguez y Belén Pérez, profesores de la Universidad Carlos III de Madrid.

Que me perdonen los periodistas, pero la experiencia como lector y como profesional me demuestra casi todos los días que les falla bastante todo el proceso de documentación subyacente a la elaboración de noticias. Evidentemente, las causas de estas carencias son variadas, y no es éste el momento para revisarlas y comentarlas. Precisamente por ello, es de agradecer la aparición de nuevos manuales de referencia sobre documentación gráfica y audiovisual, que contemplen en su planteamiento y contenido el impacto y los cambios que la sociedad digital trae a los medios de comunicación social. Porque realmente este nuevo volumen resulta ser un manual básico para el desarrollo de procesos de documentación audiovisual, con una orientación eminentemente formativa.

El texto desgrana en el capítulo 1 los conceptos básicos de la documentación audiovisual. Me gusta que se conceptualice rápidamente en dos líneas, y también me gusta que se haga una revisión histórica del tema, ya que precisamente la falta de contextualización y de conocimiento histórico es una de las graves carencias de la enseñanza de las técnicas en disciplinas sociales en nuestro país. En consecuencia, en el capítulo 2 aborda cuestiones técnicas de preservación, que me hubiese gustado ver acompañadas de una propuesta más técnicas de diseño de flujos de trabajo para preservación.

El capítulo 3 incide en algo básico: la gestión documental de información audiovisual se hace mediante las funcionalidades que ofrece un media assets management, que es un sistema de gestión de contenidos especializado en este tipo de documentos. Y es que se parte de un principio básico: la gestión documental no empieza cuando un documento llega a los departamentos de documentación o archivo, empieza desde su misma creación o concepción. Y también da por asumido y aceptado que los documentos audiovisuales son dinámicos, vivos, que pueden cambiar y mutar en cualquier momento, aplicando principio de fusión, división o combinación de información. Un poco más de detalle técnicos de este tipo de sistemas no hubiese estado mal.

El capítulo 4 y el capítulo 7 deben verse combinados, ya que en realidad, uno es introductorio de otro. Quizá un cambio de orden para futuras ediciones podría ser interesante. Y es que internet es inseparable ahora de las fuentes. Y la influencia que producen los usos, consumos y producción por parte de los usuarios está siendo más que notable en los servicios que están ofertando los medios de comunicación, que integran programación y archivo con perfiles personalizados.

El capítulo 5 entra de lleno en el tratamiento documental, y lo hace desde la perspectiva de las herramientas de descripción de contenido disponibles: taxonomías, tesauros y ontologías, que se aplican el marco de un esquema de metadatos específico. Existen diversos esquemas de metadatos que aplicar, que se introducen en el capítulo 6, y que debe verse como una continuación del contenido del capítulo 5.  Precisamente el texto demuestra que existe vida más allá del Dublin Core, y por suerte más especializada, potente y versátil. Y es que los sistemas de metadatos que mucho abarcan, poco aprietan. Me quedo con el recordatorio de lo que escribió Félix del Valle hace unos años: los documentos audiviosuales son polimórficos, polisémicos e interpretables por cada actuante (pág. 117). Y recomiendo la lectura detallada de dos apartados del capítulo, el 5.3.1 y el 5.3.2, que resumen en cuatro páginas (124-127) la esencia del tratamiento de metadatos.

El texto termina con el capítulo8, dedicado a políticas de información de alto nivel, actualizado y preciso, pero que por su contenido es el más susceptible de dejar de tenervalidez a corto y medio plazo.

La lectura del manual me ha satisfecho, es la base para formar a estudiantes de periodismo y comunicación en este contexto de actividad profesional. Para estudiantes de información y documentación, se necesitan un par de vueltas de tuerca en algunos capítulos. En cualquier caso, parece que en los últimos meses estamos disfrutando de la aparición de nuevos textos de referencia en nuestra disciplina, con nuevos enfoques, lo que es algo que ya se notaba a faltar (y dejar de mentar a Otlet como el padre de todo lo divino y lo humano, que ya resultaba un poco cansino).