El colegio, la universidad… son tu casa

«Niños, este edificio hermoso y grande es vuestra escuela y es vuestra casa. El municipio zaragozano lo ha construido con arte y lo ha amueblado con lujo para que paséis en él las mejores horas de vuestros años felices, los días más dichosos de vuestra vida. Venid diariamente muy puntuales, muy limpios y aseados, muy alegres y animosos. No ensuciéis el suelo ni escupáis en él; no toquéis ni manchéis las paredes; no rayéis las mesas; no golpeéis las puertas; no vayáis por las escaleras ni por los pasillos corriendo sin tino. Respetad las plantas y flores del jardín; no piséis los macizos ni toquéis los tallos de los arbustos; no ahuyentéis a los pájaros. No hagáis daño a otros niños durante el recreo ni juguéis de manera que pudierais ocasionar desperfectos o causaros fatiga y mal. Prestad vuestra ayuda y vuestras cosas a los compañeros necesitados para que puedan trabajar mejor y para hacerles más grata la estancia en la escuela que es, no lo olvidéis, vuestra casa hermosa, grande, alegre, simpática, envidiable, espléndida

Pedro Arnal Cavero a los colegiales el día de la inauguración del Grupo Escolar Joaquín Costa en Zaragoza, en 1936.

Arnal Cavero, Pedro. «La puesta en marcha de un gran Grupo Escolar.» Revista de Pedagogía, junio 1936, 174, pp. 251-257.