En el manual de referencia Recuperación de información. Un enfoque práctico y multidisciplinar (Madrid: Ra-Ma, 2011), he publicado en colaboración con mi colega y amiga Piedad Garrido el capítulo dedicado a Comportamiento informacional y estudios de usuarios (paǵs. 457- 473). En el mismo se esboza un panorama del estudio de las pautas de uso y consumo de información por parte del usuario final, y de las causas de ese comportamiento. Los estudios de usuario, en su formulación básica, se centran en el estudio del uso y consumo de información. Si el estudio se amplia y profundiza buscando las causas del comportamiento subyacente, estamos hablando de comportamiento informacional.
Nuestro texto toma como punto de partida la definición de Marcia Bates:
“Comportamiento informacional es actualmente el término preferido para describir las múltiples formas en las cuales los humanos interaccionan con la información, en particular, las formas en las que la gente busca y usa la información. Comportamiento informacional es también la expresión usada en la ciencias de la información para referirse a una subdisciplina que aborda una amplia gama de tipos de investigación orientadas a comprender la relación humana con la información.”
Y pasa a analizar varios modelos de comportamiento informacional, como los propuestos por Wilson, Belkin, Oddy y Crofts, Dervin y NIlan, Ellis, Bates, Kuhlthau y Pirolli y Card. Se incide en la importancia que tiene la aproximación cualitativa, frente a otras fundadas exclusivamente en el análisis cuantitativo. Como se puede intuir, el texto se enfoca especialmente en el comportamiento informacional en entornos mediados tecnológicamente. Plantea las tres grandes áreas establecidas hace ya una década por Choo, Detlor y Turnbull, correspondientes a necesidades, búsqueda y uso, a las que podemos añadir la organización. Expone los enfoques macro y micro, y la gran variedad de estudios que pueden encontrarse en la bibliografía especializada, íntimamente influenciados por el contexto. Delinea brevemente varias técnicas de captura de información para el estudio del comportamiento informacional, y acaba reflexionando sobre la importancia de abordar la cuestión desde la resolución de problemas y la noción del «suficientemente bueno». Y prometo que redactaré un ThinkEPI sobre la cuestión en unas semanas…
